La mayoría de los casos de pérdida de audición se deben de a la evolución natural del sistema auditivo, y se relacionan con largas exposiciones a ruidos muy intensos, a efectos secundarios de determinados fármacos o a traumatismos craneoencefálicos. Para estas personas, los audífonos tienen un impacto positivo en su calidad de vida.
En niños con problemas de audición, la utilización de audífonos contribuye al desarrollo de las estructuras esenciales del lenguaje, ya que la amplificación del sonido estimula y ayuda a crecer los centros auditivos del cerebro.
Los socios del Club Atlàntida disfrutan de descuentos especiales en cualquiera de los centros colaboradores.