Durante el embarazo, las revisiones médicas son constantes. Pero, una vez la mujer da a la luz, no se acaban. Te contamos por qué es tan importante hacerse una revisión posparto y asegurar que la recuperación de la reciente madre es la adecuada.
Las visitas ginecológicas no acaban cuando la mujer da a luz. Tras el parto, también hay una serie de revisiones médicas que son importantes para asegurar que la recuperación de la madre es la correcta.
El cuerpo de la mujer durante el embarazo ha experimentado muchos cambios y, una vez haya dado a luz, es crucial vigilar que, progresivamente, el cuerpo se va recuperando. Y es que, por ejemplo, el útero durante el embarazo aumenta cinco veces su tamaño normal.
¿Qué son las revisiones posparto?
Con el bebé ya en casa, la mujer puede experimentar una montaña rusa de emociones, pero, además, debe cuidar su salud y asegurar una buena progresión. En las primeras semanas de maternidad, se puede tener la sensación de no tener tiempo para todo, pero es importante comprobar que el cuerpo vuelve a la normalidad y lo hace saludablemente.
En las visitas del puerperio o posparto se examina el estado físico y emocional de la madre.
En una primera visita, a los pocos días de dar a luz, se comprueban la cicatriz y la evolución de la madre. También se pueden extraer los puntos, si hay y si fuera necesario. Luego, una vez pasada la cuarentena, tiene lugar otra visita ginecológica posparto más completa.
De todas maneras, se ha de consultar sin esperar a estas revisiones postparto si:
- Se tiene fiebre superior a 38 ºC durante más de dos días
- Se hinchan piernas y manos de forma repentina
- Se inflaman o se agrietan los pezones
- Se enrojece la cicatriz de la cesárea o de la episiotomía
- Se nota dolor en el abdomen o en la cicatriz
Cómo es la visita ginecológica posparto
Evaluar la recuperación de la madre es importante. Por eso, entre las pruebas o los exámenes médicos que deben hacerse posparto y tras la cuarentena, destacan:
- Exploración médica y revisión de la cicatriz, sea de la cesárea o de la episiotomía.
- Tacto vaginal para comprobar la posición y el tamaño del útero.
- Ecografía vaginal.
- Exploración de las mamas.
- En algunos casos, se solicitan pruebas adicionales, como una citología ginecológica o una analítica de sangre o de orina.
Por otra parte, también es momento de resolver muchas dudas y preocupaciones que puede tener la madre. Así, durante esta visita ginecológica posparto se habla de cuándo se pueden reiniciar las relaciones sexuales, de los tipos de anticonceptivos recomendados para cada pareja, de la reaparición de la menstruación, etc También se hará un seguimiento de la lactancia materna y se darán consejos sobre la alimentación recomendada para esta etapa o sobre cómo mejorar el suelo pélvico.
Los profesionales sanitarios hacen hincapié en las ventajas de la alimentación saludable y de la práctica de algún tipo de ejercicio físico más allá de la reeducación del suelo pélvico. Se trata que, poco a poco, de que la mujer vaya retomando buenos hábitos y sepa que cuidando su salud también está cuidando la de su bebé.
Finalmente, cabe destacar que estas revisiones ginecológicas posparto son un buen momento para evaluar el estado anímico de la madre y descartar posibles trastornos depresivos, que afectan al 15% de las mujeres tras el parto. Y es que la depresión posparto es muy frecuente y suele causar una sensación de tristeza profunda, incapacidad para disfrutar de este momento y desbordamiento, que, incluso, puede dificultar una buena relación con el bebé. Todos los seguros médicos familiares de Atlàntida, como el seguro Infinity, están pensados para ofrecerte la solución que necesites en cada momento. Descubre sus diferentes pólizas y los servicios (como la revisión posparto), o las ventajas para tu bebé, puedes disfrutar desde hoy mismo.