Un parto prematuro es el que sucede antes de las 37 semanas de embarazo es decir el parto anterior a las tres semanas antes de la fecha probable de parto.
El nacimiento de un prematuro se presenta entre el 6 al 12 % de todos los partos. En España la incidencia es del 6. 94 % .
Se desconoce la causa de la mayoría de estos nacimientos pero puede ocasionar problemas en el recién nacido. Los bebes prematuros no tienen los pulmones completamente desarrollados a lo que se suma otros trastornos de inmadurez que aumentan cuanto mayor es el grado de prematuridad.
Uno de cada 10 nacimientos en el mundo tiene lugar antes de la 37 semanas de embarazo. La intervención médica precoz puede detenerlo con tratamientos utilizados desde hace años con buenos resultados.
SÍNTOMAS
Los síntomas que presenta la embarazada suelen ser dolor leve o constante, endurecimiento del abdomen, sensación de presión en la pelvis, cólicos o dolor en la zona lumbar.
Las contracciones pueden dilatar el cuello uterino por lo que el reposo es fundamental si una embarazada nota alguno de estos síntomas.
Es importante el descanso físico y mental para relajar los músculos y reducir la actividad uterina.
Una nutrición adecuada es fundamental para el desarrollo del feto y también la tranquilidad psíquica durante este periodo ya que incluso la ansiedad o el estrés se han relacionado con el parto prematuro así como estar largas horas de pie en el trabajo. Tampoco se debe estimular los pezones ni hacer ejercicios bruscos.
Todos los hospitales de Barcelona como San Joan de Deu, Hospital Maternidad, Hospital de San Pablo o Vall d’Hebron están dotados de Unidades de Cuidados Intensivos Neonatales equipadas con profesionales y medios tecnológicos a la altura de cualquier hospital americano o del mundo. Se utilizan los sistemas más avanzados como incubadoras, respiradores, calentadores o monitores para registrar los signos vitales del recién nacido.
Tener un bebé prematuro es una de las situaciones más angustiosas que pueden sufrir unos padres por lo que la prevención es importante y ante todo el reposo de la embarazada desde la semana 28 hasta la semana 34.
Dra. Maria Isabel Ribau Diez,
Consulta de Obstetricia y Ginecologia