Las plantillas son una de las mejores soluciones para cuidar los pies. Hoy día, se pueden encontrar de varios materiales y algunas están especialmente diseñadas para personas con problemas o dolor en los pies.
Los pies son una parte fundamental del cuerpo y no todos son iguales. Están sometidos a diario a un gran desgaste y, además, las personas suelen acordarse de ellos (y cuidarlos) únicamente cuando presentan alguna dolencia. Si la pisada no es correcta ni el calzado de calidad, es probable acabar desarrollando dolores musculares y articulares.
Por lo tanto, es indispensable aprender a proteger los pies correctamente, y una de las mejores soluciones para ello son las plantillas, juntamente a un buen calzado. Las plantillas pueden ser utilizadas por todo el mundo y para la vida diaria. Lo más importante es tener en cuenta que, como cada pie es único, las plantillas también deberían serlo.
Tipos de plantillas
Actualmente existen infinidad de plantillas. Se pueden catalogar por su uso, material, etc. Hay plantillas para pies fríos, dolor de pies, anatómicas, ortopédicas, etc. A su vez, también hay plantillas especiales como las que usan los deportistas.
Y, en cuanto a los materiales, las más comunes son las de gel, hidrogel, caucho, carbón activado o espuma látex forrada.
Por qué usar plantillas
Las plantillas acomodan, corrigen o modifican la pisada para evitar que la persona acabe teniendo problemas de salud. Satisfacen dos necesidades: por un lado, mejoran la comodidad de cualquier zapato o calzado, y, por el otro, resuelven puntos específicos de incomodidad, como rozaduras, presiones o la falta de circulación.
Por lo tanto, las plantillas son un método para prevenir posibles lesiones, y entre las razones para usarlas a diario destacan que:
- Optimizan las propiedades del calzado.
- Estabilizan el pie y aportan equilibrio.
- Limitan los dolores y las molestias del pie.
- Mejoran la alineación del cuerpo.
- Refuerzan la amortiguación natural.
- Mejoran la pisada.
- Reducen el cansancio.
- Evitan lesiones como hernias discales, rotaciones de cadera o desviaciones de la columna.
- Ayudan al pie a adaptarse al zapato.
Para quién se recomiendan
Las plantillas, en realidad, deben ser usadas por todo tipo de personas. Aunque es cierto que hay situaciones concretas en las que, aún más, son altamente recomendables. Por ejemplo, hay trabajos que implican estar mucho tiempo de pie o andar largas distancias.
En esos casos, usar plantillas extraíbles de gel o hidrogel puede ayudar a notarse menos cansado al final de la jornada laboral. Ayudarán a amortiguar la pisada y equilibrar los puntos de carga.
Los deportistas también deben poner el foco en el uso de plantillas especiales, que les proporcionarán, además de una gran comodidad, un alivio en las articulaciones. A largo plazo, las plantillas para deportistas facilitan una mejor recuperación. Cada modelo tiene sus especificaciones y es diferente la plantilla más adecuada para correr, practicar senderismo o practicar deportes de invierno.
Por otro lado, las plantillas son muy eficaces para personas con problemas en los pies como juanetes, arco del pie, pies cavos o pies planos. El médico especialista, el podólogo, valorará si es bueno o no recomendar el uso de estas soluciones y cuál es la mejor plantilla para cada caso.
Las plantillas ortopédicas
Las plantillas ortopédicas están especialmente diseñadas para dar soporte a talón y pie, con el objetivo de mejorar o modificar aspectos funcionales o estructurales del sistema neuromusculoesquelético. Son una solución para amortiguar o aliviar algunos de los síntomas de problemas como la fascitis plantar o la tendinitis.
Este tipo de plantillas pueden ser parte de la solución a esas dolencias, porque estabilizan el talón, ayudan a apoyar el arco del pie, absorben los impactos, reducen la presión sobre el talón e, incluso, llegan a amortiguar los ligamentos inflamados. Eso sí, lo idea es que estén hechas a medida, para resolver la necesidad concreta de cada pie y paciente.
Las plantillas ergonómicas
Llamadas también ortesis plantares, este tipo de plantilla se incorpora a las zapatillas o los zapatos para individualizar la pisada. Por eso, son las más habituales entre los deportistas, ya que la función de la plantilla es ajustar la pisada del atleta para reducir el impacto a la hora de correr o hacer otra actividad.
Entre otros beneficios, distribuyen el peso de la persona, previenen los dolores en las articulaciones, mejoran el equilibrio y reducen el cansancio y la fatiga. Finalmente, reducen también la aparición de lesiones.
Dr. Carles Rabassa
Centre Mèdic Atlàntida