En este momento estás viendo Josep Anton Parache se jubila: 50 años al servicio de Atlàntida y de sus asegurados

Josep Anton Parache se jubila: 50 años al servicio de Atlàntida y de sus asegurados

Josep Anton Parache acaba de jubilarse. Después de casi 50 años en Grup Atlàntida, de los cuáles más de 25 como director general, ha vivido de todo en el sector de los seguros y es muy crítico con la guerra de precios que se vive actualmente. Pero ante esto, dice, Atlàntida ha hecho una apuesta sólida y exitosa por diversificarse gracias a unos liderazgos responsables y a un equipo de profesionales muy potente. «Nos acercamos al 95 aniversario, pero estoy convencido de que podemos llegar a los 150 años», asegura. Para conseguirlo, es necesario mantener las señas de identidad de Atlàntida: trato exquisito, servicio profesional, innovación, precios ajustados y, sobre todo, pasión por el trabajo bien hecho.

Áudio completo de la entrevista [en catalán]:

 

Tu vocación era dedicarte a las Bellas Artes. ¿Cómo terminaste trabajando en Atlàntida?

Pues, mira, a Atlàntida vine por el horario. En las compañías de seguros se trabajaba de 8 a 3. Yo quería estudiar Derecho y trabajando en Atlàntida podía acabar un poquito antes, sobre las 14:30. Gracias a este horario entré en Atlàntida en 1975 con 18 añitos.

¿Cómo era Atlántida en 1975?

Muy entrañable. Atlàntida era una empresa familiar muy entrañable y con un ambiente increíble. Al frente estaba el señor Josep Rabassa, en paz descanse. Una persona con mucho carisma que fue quien me enseñó todo lo que he aprendido en el ámbito profesional: la cultura de empresa, la forma de ser, la forma de hablar con los asegurados… Sabíamos cada asegurado la persona que era, qué familia era, o sea conocíamos a todos los asegurados casi… Antes, en verano, había trabajado en una armería y en un banco y en Atlàntida vi que era diferente. Fui evolucionando, evolucionando, evolucionando… hasta hoy.

Cuando empezaste, ¿qué hacías?

Yo me dedicaba a repasar las facturas del laboratorio de análisis y atender al público. Cuando venía una persona, tenía que salir para autorizarle el servicio que necesitaba. La facturación del laboratorio era bastante importante, bastante grande, y yo hacía la facturación de entrada. Éste fue el primer trabajo que hice.

¿Después qué hiciste? Porque entiendo que has ido subiendo hasta llegar a ser director general, has hecho toda tu carrera aquí dentro.

A ver… fui a la mili. Para que veas la empresa como era, en la época cuando hice la mili, si llevabas dos años en la empresa, te pagaban el 50% del sueldo y aquí me pagaron el 100%. Cuando volví de la mili, en vez de realizar la facturación del tema de laboratorios y atender al público, entonces ya hice los cambios: de domicilio, de médico, de póliza y toda la cuestión administrativa pasé a hacerla, conjuntamente con mi jefe, el señor Isern, y pasé también a contabilidad desde el punto de vista de caja. O sea, yo pagaba a los médicos y proveedores. Se trataba de un tema de responsabilidad porque muchos pagos eran en metálico. Fui progresando en la empresa y cuando terminé la carrera y llevaba 5 o 6 años trabajando en Atlántida, me ofrecieron hacer un plan de carrera y ocupar el puesto del señor Rabassa.

 

“Ya lo ves, no he cambiado.

Le cogí el gustillo a Atlàntida y hasta hoy”

 

¿Te lo ofrecieron que eras muy jovencito todavía?

Sí, sí. Al principio él no dejó el cargo. Pero con 28 años o 29, ya hablamos de ello. Hasta entonces, yo pensaba que cuando terminara la carrera montaría un bufete con algunos compañeros de la facultad. Pero ya me había casado. Lo hablamos con la mujer y me dije “¿y por qué no? Siempre estás a tiempo de cambiar”. Pero, ya lo ves, no he cambiado. Le cogí el gustillo y hasta hoy.

¿Cuándo empezaste a hacer de director general?

En el 85 o 86 me dieron poderes y en el 92 me nombraron director general.

Por tanto, has sido más de 25 años de director general. ¿En todos estos años cómo ha cambiado el sector de los seguros de salud?

Ha cambiado mucho, mucho, pero como la sociedad en general, porque todo ha cambiado muchísimo. Quizá el mayor cambio sea la guerra de precios que estamos viviendo. Antes el trato con los médicos de todas las aseguradoras era exquisito, ahora la mayoría viven a expensas del médico. La filosofía de las grandes compañías es pagar menos para ganar más y por eso muchas pagan a los profesionales a peso, como digo yo. Como consecuencia, las aseguradoras no encontramos profesionales. La gente joven se va fuera de España, porque aquí no se gana la vida, o se la gana mal, en comparación con el esfuerzo que debe realizar, tanto por la cuestión de los estudios como por la cuestión profesional, de formación permanente, lo que hace que el ambiente se haya enrarecido. Además muchas realizan prácticas de competencia desleal con pólizas a precios irrisorios.

Precisamente la atención al asegurado también ha sido siempre uno de los rasgos que Atlàntida ha cuidado mucho.

En Atlàntida el trato sigue siendo igual: exquisito. Casi conocemos a cada asegurado, tenemos un equipo de cuatro personas, Jenni, Joanna, Jordi y Núria, que los atienden personalmente. Nosotros pensamos que la diferencia entre los grandes y Atlàntida es el trato. Por eso, intentamos que sea exquisito. En función de la situación y de las circunstancias, estudiamos todas las demandas y si está a nuestro alcance damos respuesta. Queremos fomentar el boca-oreja y esto lo hacemos con la atención al asegurado. Esta atención se cuida desde el primer momento. ¿Y esto cómo se hace? Pues con el trato, informándole correctamente, atendiéndolo, estando pendiente de él por si tiene alguna necesidad. En una palabra, estando encima de ellos.

 

“Mas d’Anglí fue tan bien

que se convirtió en referente del sector”

 

De hecho, Atlàntida es de las pocas compañías familiares de Barcelona que quedan, todas han sido absorbidas…

Ni más ni menos. Para evitar la absorción en Atlàntida lo que hemos hecho es diversificar. Como compañía familiar, nosotros no podemos realizar las mismas políticas agresivas de las grandes aseguradoras porque tendríamos que cerrar, ya que los números no nos saldrían. Nosotros intentamos, por ejemplo, no aplicar subidas desmedidas a los asegurados más mayores. A mí me han llegado a explicar aumentos de 80 y 100 euros en otras compañías, pero por mucho que haya una mayor siniestralidad, ¿hay que hacer estos aumentos? Nosotros pensamos que no y por eso en su día fuimos pioneros con la póliza Gran Class para personas mayores, que permiten darles cobertura a un precio muy ajustado.

Ahora nos hablabas de que para no ser absorbidos optásteis por diversificar. Explícanos un poco esa política de diversificación.

Cuando terminamos de pagar el centro médico contiguo, que era un servicio de radiodiagnóstico, el Consejo de Administración planteó la posibilidad de invertir en residencias de la tercera edad. Nuestra voluntad era ofrecer coberturas globales al asegurado, que incluyeran todo el ciclo vital, desde el nacimiento hasta la muerte, y las residencias de tercera edad encajaban perfectamente. A partir de ahí, fue buscar espacios que fueran óptimos, idóneos, porque queríamos una residencia urbana, por la cuestión de la proximidad con la familia, y que así, el abuelo estuviera bien atendido, pero al mismo tiempo la familia pudiera venir a visitarlo constantemente. Y encontramos Mas d’Anglí, donde abrimos nuestra primera residencia.

¡Y ahora ya tenéis 3!

Mas d’Anglí fue tan bien que se convirtió en referente del sector y los propios arquitectos nos ofrecieron la opción de Mas Piteu. Como la de Mas d’Anglí nos iba tan bien aceptamos y hace unos 10 años más o menos que tenemos Mas Piteu y también súpercontentos. El éxito fue total.

Y ahora acabáis de abrir Maragall…

Con Maragall tenemos ahora una residencia de 5 estrellas superior, otra de 5 estrellas y otra de 4 estrellas. En las tres, la atención es exquisita. Por eso nos va muy bien.

 

“En Atlàntida siempre pensamos

en dar respuesta a todas las necesidades

vinculadas a la salud”

 

Pero las residencias no son el único sector en el que os habéis diversificado…

Nos dimos cuenta de que hay personas que antes de ingresar en una residencia quieren ser atendidas en su domicilio y por eso montamos Dependentia. Después abrimos la Clínica Dental, la Clínica Estética y Medicina Libre, el servicio de psicosalud…

De hecho, siempre estáis pensando en cómo ayudar y cómo mejorar la atención a las personas, de esa visión global que comentas, que es muy marca de la casa…

Exacto. En Atlàntida siempre pensamos en dar respuesta a todas las necesidades que puedan tener las personas vinculadas a la salud.

Y ahora, ¿cómo ves el futuro de Atlàntida?

Yo le veo fantástico. Siempre que sigamos con el buen servicio y el buen trato a los asegurados tendremos clientes ya sea en la aseguradora, en las residencias, en las clínicas o en Dependentia. En el grupo, una empresa apoya a la otra, son vasos comunicantes. Así pues, veo un futuro halagüeño. Nos acercamos al 95 aniversario, pero estoy convencido de que podemos llegar a los 150 años. Hoy, la supervivencia de las empresas es complicada, pero si somos innovadores, damos un buen servicio a un precio ajustado y tenemos voluntad, pues yo pienso que tenemos mucho camino por hacer porque tenemos un equipo que es un dream team, mejor que el Barça .

¿Qué innovaciones crees que veremos en el mundo de los seguros en los próximos años?

Una que ha llegado ya es la teleasistencia. En el cuadro facultativo de Atlàntida ya tenemos atención de urgencia en teleasistencia. Y otra muy importante será la telemedicina. Ya hemos empezado a ver robots como el Da Vinci realizando operaciones a distancia y eso irá más. Vamos hacia la tecnificación en grado superlativo.

Y en el ámbito de salud en general, como grupo global que sois, ¿cómo ves la salud y el bienestar de las personas?

La salud y el bienestar de las personas se han convertido en una inquietud social. Se ha alargado la esperanza de vida y nos gusta vivir mucho, nos gusta vivir más, nos gusta vivir bien, nos gusta vivir con calidad. Y este vivir con calidad significa recursos, significa medios, significa servicio. Y ese servicio es el que puede ofrecer Atlàntida. Para dar respuesta a estas necesidades debemos mirar a ver cuáles son las necesidades del asegurado en todas las etapas de su vida y darle soluciones. Un claro ejemplo, es la Clínica Estética Atlàntida. Una de las grandes tendencias actuales es el cuidado de la imagen y por eso abrimos la Clínica Estética y creamos la primera póliza de estética del mercado.

 

Siempre he intentado inculcar la visión

de equipo, no la individualidad

 

De esos casi 50 años que has estado en Atlàntida, ¿qué recuerdos te llevas?

Los recuerdos del señor Rabassa, la humanidad, cómo hablaba con los asegurados, cómo hablaba con los médicos. Después los compañeros… Atlàntida para mí es como una familia y echaré de menos a los miembros de esta familia. A la celebración de mi despedida vinieron personas que ya hace años que estan jubiladas y todos recuerdan el trato, los compañeros, el compañerismo… Como director general, siempre he hablado de equipo, siempre he intentado inculcar el tema equipo, no la individualidad. El equipo hace que seas más fuerte y hace que estés más resguardado porque tienes una familia.

Claro, dentro de esta familia, los asegurados son un miembro más. ¿Cómo ha sido tu trato con los asegurados todos estos años?

Siempre siempre he tenido la puerta abierta a los asegurados para cualquier cosa que pudieran necesitar. Nunca me he escondido ni he negado una entrevista o una visita. Esta filosofía me ha permitido incluso entablar amistad con algunos asegurados. Recuerdo a un asegurado que vino a poner una demanda porque el dermatólogo no le había atendido como él pensaba y había tenido un problema que había derivado en un carcinoma. Bien, pues con aquel señor, con el tiempo, gracias a la solución que le ofrecimos, terminamos que, de vez en cuando, nos veíamos y íbamos a comer juntos. Éste es un ejemplo, pero puedo contar muchos más de asegurados agradecidos con los que acababas haciendo amistad.

¿Qué te gustaría decirles a los asegurados como despedida?

Que si no lo he hecho mejor es porque no he sabido.

Deja una respuesta

ATLÀNTIDA MÈDICA D'ESPECIALITATS S.A. D'ASSEGURANCES com a responsable del tractament tractarà les teves dades amb la finalitat de gestionar els comentaris que facis a través del web. Pots accedir, rectificar i suprimir les teves dades, així com exercir altres drets consultant la informació addicional i detallada sobre protecció de dades a la nostra Política de privacitat